Niñez expuesta a benceno en zonas con actividad petroquímica — ecologica
Usted está aquí: Inicio / Artículos / Niñez expuesta a benceno en zonas con actividad petroquímica

Niñez expuesta a benceno en zonas con actividad petroquímica

Kelvin Saldaña Villanueva y Octavio Gaspar Ramírez

Según el Clean Air Institute, la ciudad de Monterrey y su área metropolitana (AMM) es una de las más contaminadas de Latinoamérica a nivel atmosférico, a causa de su alta actividad industrial y del tráfico vehicular.

Particularmente, en Cadereyta Jiménez, donde se ubica una refinería, la actividad petroquímica acentúa los problemas de contaminación, por las emisiones de compuestos volátiles, entre ellos el benceno. Este compuesto es un hidrocarburo extremadamente tóxico que se ha clasificado como un cancerígeno humano por el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés).

Además se ha descrito ampliamente que la exposición a benceno aumenta el riesgo de desarrollar diferentes enfermedades como leucemia linfocítica crónica, leucemia mieloide aguda y varios tipos de cáncer (linfoma no Hodgkin y cáncer de pulmón).

En México existen sitios en los que la exposición a benceno en niñas y niños es de alta preocupación. Tal es el caso de Cadereyta Jiménez, en donde el 28 por ciento de los niños que participaron en un estudio de investigación (Ochoa-Martínez AC) presentaron una exposición a benceno muy por encima del índice de exposición biológica establecido por la NOM-127-SSA1 para adultos ocupacionalmente expuestos a este contaminante.

Al comparar estos resultados con estudios realizados en otros países se identificó que la exposición crónica a benceno de los niños de Cadereyta Jiménez es similar a la que presentan los trabajadores de estaciones de gas o de gasolinerías en México y otros países.

Es decir, las niñas y niños están expuestos al benceno como si fueran adultos que trabajan en la industria del benceno. Dicho escenario de exposición es similar a lo reportado por Pelallo-Martínez NA en sitios petroquímicos del estado de Veracruz.

Este autor documenta que la alta exposición a benceno en niñas y niños está relacionada a efectos hematológicos a nivel subclínico como la disminución de hemoglobina, glóbulos rojos y glóbulos blancos, así como algunos eventos genotóxicos como aberraciones y translocaciones cromosómicas.

Los datos anteriores resultan aún más alarmantes si consideramos que otros agentes tóxicos, como los metales pesados, se suman a dicha exposición. Pelallo-Martínez NA señala que los efectos tóxicos se agudizan cuando la exposición a benceno se combina con otros contaminantes como hidrocarburos aromáticos policíclicos y metales.

Información reciente dada a conocer por el Proyecto Nacional de Investigación e Incidencia (Pronaii) de leucemia infantil del Conahcyt, revela que nueve de cada diez casos de leucemia linfoblástica aguda (LLA) se deben a diversos factores ambientales, entre los que se encuentra la exposición a benceno y otras sustancias químicas. En México, la leucemia representa el 52 por ciento de los cánceres en menores de 18 años, siendo la principal causa de muerte en menores en edades entre cinco y 14 años.

En cuanto a regulaciones para la protección al ambiente y la salud humana en México, contamos únicamente con la NOM-127-SSA1-2021 que regula las sustancias químicas en el agua destinada para uso y consumo humano, y la NOM-047-SSA-2011 que establece los límites de exposición ocupacional.

Irónicamente, el benceno no está incluido en los contaminantes criterio para la calidad del aire, solamente se considera en la NOM-165-SEMARNAT-2013 para su reporte dentro del Registro de Emisiones y Transferencia de Contaminantes (RETC).

La falta de regulación ambiental es una razón de peso por la que poblaciones mexicanas resultan altamente expuestas a benceno y otros contaminantes de manera crónica, especialmente en zonas urbanizadas e industrializadas. Por ello resulta importante que los sectores de ambiente y salud incluyan en sus agendas la vigilancia de la exposición a benceno, especialmente, en las regiones de emergencia ambiental donde la actividad industrial ha resultado en una afectación grave para la salud de los habitantes.

Haciendo hincapié al informe de la UNICEF, señala que cada año mueren más de 1.7 millones de niños menores de cinco años como consecuencia de impactos ambientales los cuales son evitables. Por ello, se insta a comprender que la crisis ambiental también es una crisis de derechos de la infancia.

El Estado mexicano debe priorizar la salud y el bienestar infantil por encima de cualquier interés económico.

Kelvin Saldaña Villanueva1 y Octavio Gaspar Ramírez2

1,2Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco,
Subsede Noreste
1,2Programa Nacional Estratégico Agentes Tóxicos y Procesos Contaminantes del Conahcyt
1Posdoctorante, [email protected]
2Investigador, [email protected]