A más calor... menos salud
Iván Restrepo
Las lluvias en casi todo México redujeron este julio el calor sofocante, las altas temperaturas, las mayores de la historia. Las víctimas de las olas de calor suman ya alrededor de 200. Las últimas tres, en la región agrícola de Baja California. Además, casi el 80 por ciento de la superficie nacional registró sequía y virtualmente todos los municipios han tenido este año problemas para surtir de agua a los hogares.
Las olas de calor, falta de líquido y la sequía ocasionaron también la disminución del hato ganadero y las cosechas de los alimentos básicos, de frutas y legumbres. Afectaron la economía y la calidad de vida de las familias que poseen animales utilizados en las labores agrícolas; o huertos y animales de traspatio, que son parte de su patrimonio y sustento.
Se secaron lagos y lagunas de las que vivían comunidades ribereñas; o registraron tan bajo nivel que murió la fauna acuática. Ríos y arroyos antes con agua abundante, casi no la tuvieron en amplias regiones de Hidalgo, San Luis Potosí, Michoacán, Zacatecas y Coahuila. Hoy, con las intensas lluvias, inundan poblados y campos de cultivo.
Sufrió también la fauna: murieron pájaros carpinteros, loros, tucanes, búhos, pelícanos, murciélagos, lechuzas, águilas y coyotes y unos 300 ejemplares del mono ahuyador o saraguato en Campeche, Veracruz, Chiapas y Tabasco.
La ola de calor y los incendios también dejaron su huella negativa en el sur del continente americano. Y desde el mes pasado afecta a Estados Unidos y a Europa; al Mediterráneo, Asia y norte de África. Todo indica que las temperaturas subirán este 2024 más que en años anteriores.
En esta ocasión, ofrecemos en La Jornada Ecológica la opinión de los organismos más importantes de la comunidad de naciones sobre los efectos del calentamiento global en la salud de las poblaciones y en las actividades que realizan. Se destaca lo que debe hacer la gente ante las olas de calor a fin de no ser víctimas mortales de ellas. Igualmente, lo referente al fenómeno El Niño y al aumento del dengue en diversos países.
Especial atención se concede al turismo pues visitará en masa la ciudad de París con motivo de los juegos olímpicos, a celebrarse del 26 de julio al 11 de agosto, la época de mayor calor en Francia.
De todo lo anterior informan en documentos especiales la Organización de las Naciones Unidas, ONU, La Mundial y la Panamericana de la Salud, OMS y OPS, respectivamente; y las que advierten del cambio climático. Igualmente, centros de investigación y prestigiosos científicos de diversos países.
El propósito al ofrecer todo este material es llamar la atención, por enésima vez, sobre la responsabilidad que los gobiernos, el sector industrial y la sociedad en su conjunto tienen en lo que ocurre con el clima a nivel nacional y mundial.
Y reiterar que si no se varían las actuales políticas de derroche energético, de uso creciente de hidrocarburos, lo que nos espera es un futuro con más desajustes ambientales, económicos, sociales y de salud.
En el caso de México, cabe destacar la necesidad de cumplir con los programas tendientes a combatir el calentamiento global, retener al máximo el agua que traen huracanes y ciclones y con ella alimentar las grandes y medianas obras hidráulicas, rescatar lagos y lagunas. Y también el manto freático, sobreexplotado al máximo. Ahora la dejamos ir, contaminada, al mar. Y todo por la falta de obra pública dirigida a captar tan indispensable recurso.
Iván Restrepo
Director de La Jornada Ecológica