Proyectos realizados desde la iniciativa privada
En los trabajos de reforestación en Oaxaca también participan entidades privadas. Una de ellas es asociación civil Lu Layú (palabra que quiere decir “sobre la tierra”, es zapoteco del istmo) integrada por especialistas en la materia. Ésta se dedica fundamentalmente a la gestión e implementación de proyectos con enfoque de producción agroecológica, orgánica y el manejo de ecotecnologías para la vivienda.
Lu Layú, AC, trabaja desde un enfoque de aprendizaje participativo, bajo la inclusión e igualdad de género, incluyendo a grupos de productores, órganos de gobierno municipales y regionales; organismos de financiamiento y otros relacionados con el tema. Tal es el caso de los comités y centros educativos, a fin de generar conocimientos locales y la apropiación y continuidad de proyectos a largo plazo.
El objetivo de la asociación es trabajar en el autodesarrollo comunitario con proyectos de beneficio social en comunidades indígenas. Prioritariamente aquellas con altos índices de marginación y fomentando la participación de las mujeres y grupos vulnerables.
Algunas de las principales actividades son crear esquemas de autodesarrollo comunitario y seguridad alimentaria, basadas en el empoderamiento productivo de la mujer como eje de bienestar familiar; fomentar el crecimiento de los sistemas agrícolas, pecuarios y de transformación, bajo modelos agroecológicos.
También la diversificación productiva (incluyendo la participación de grupos vulnerables); impulsar a los sistemas locales de producción artesanal; crear modelos de valorización y rescate y apropiación social de los conocimientos y técnicas tradicionales; fomento a la generación de conocimiento local y establecimiento de sistemas de comercialización con impulso al consumo local y responsable.
A la vez, contempla la apertura a nuevos mercados para aumento de los flujos de capital; la implementación de sistemas bioconstructivos y ecotecnologías para el mejoramiento de la vivienda.
La misión de dicha asociación se enfoca a establecer estrategias para facilitar el autodesarrollo comunitario, basadas en el aprovechamiento de los recursos de cada área, mediante la generación de conocimientos locales y encadenamiento productivo; la implementación de sistemas agroecológicos y la apropiación de ecotecnologías, que promuevan la autosuficiencia alimentaria, y la resiliencia y sustentabilidad ambiental.
La idea es que sea una organización con impacto a nivel estatal y nacional, vinculada a los sectores públicos y privados relacionados, con miras a lograr el mejoramiento de la calidad de vida de los pueblos y comunidades de México. Varios son sus proyectos. Los más destacados los mencionamos enseguida.
Producción agrícola y textil
Con financiamiento de Oxfam-México, dicha asociación trabajó la iniciativa de Desarrollo Económico Municipal. Se basa en el empoderamiento productivo de las mujeres artesanas y campesinas de San Vicente Coatlán, distrito de Ejutla, región Sierra Sur, con proyectos de huertos comunitarios, cultivos de hortalizas a cielo abierto y sistema milpa. En San Vicente también se logró establecer una cooperativa de artesanas textiles.
La economía municipal de San Vicente impacta tres aspectos: el fortalecimiento del sistema textil; el aumento de la producción de alimentos a nivel municipal y el impulso al consumo local. Otros trabajos que se habían realizado con anterioridad en la comunidad fue la instalación de sistemas de captación de agua de lluvia y baños secos para la vivienda.
Esta estrategia integral se realizó en coordinación con organizaciones de la sociedad civil y el cofinanciamientos de fuentes municipales y de donatarias.
Cabe agregar el trabajo realizado con productores de café en localidades del distrito de Putla. Ello, a través de asistencia técnica en producción de plantas, podas y renovación de cafetales.
La labor con otros productores
En las regiones de la Sierra Sur y Valles Centrales de Oaxaca se trabajó con productores de la cadena maguey mezcal, en el establecimiento de cultivos y certificación de los de tipo orgánico.
De igual forma, en la región Mixteca sobresale el cultivo de maguey de especies silvestres. Esto, con el objetivo de reducir el impacto negativo que ocasiona la sobreexplotación de maguey para la producción de mezcal.
En la región Mixteca se trabajó en colaboración con las autoridades agrarias de Santo Domingo Yanhuitlán y otra asociación civil. Se implementaron proyectos de restauración forestal que comprenden desde la gestión y producción de plántulas, hasta la reforestación, con obras de conservación de suelo y agua.
Otro proyecto se refiere a la captación de agua de lluvia en las viviendas que carecían del vital elemento. Para ese fin se hicieron obras para captar el líquido y conservar en buen estado los suelos pues esta región de Oaxaca es uno de los lugares con mayor índice de erosión en el país. En paralelo, se construyeron sistemas para potabilizar el recurso citado. Estas acciones se acompañaron de campañas de concientización sobre el uso racional del agua.
En años anteriores, han realizado obras similares con buenos resultados, pues han reforestado con especies nativas; trabajan en la reposición de árboles muertos y aplicación de medidas emergentes (control de pastoreo, plagas y enfermedades forestales, control y combate de incendios forestales y/o aplicación de riesgos auxiliares) aún después de concluidos los proyectos.
Los trabajos en torno a los cafetos
Este año, con financiamiento del Programa de Pequeñas Donaciones (PPD) del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM), del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), se concluyó el proyecto Fortalecimiento a la Cadena de Valor Café, en las comunidades indígenas de Santa Cruz Itundujia, distrito Putla, región Sierra Sur.
Su propósito central fue establecer prácticas de producción agroecológica y orgánica para la rehabilitación de cafetales, con la participación activa de las mujeres de esas comunidades. Ello permitió restaurar, conservar y mejorar las condiciones y productividad de los cafetales. En paralelo, se integró una propuesta comercial que incluye la generación de marca, certificación orgánica del grupo de productores y estrategia de marketing digital.
Con todo ello se buscó fortalecer la cadena de valor del café en la localidad, además de capacitar a las productoras en temas de cumplimiento con los estándares de certificación Orgánica y certificación Bird Friendly. Y en papalelo, capacitar a productoras en buenas prácticas para el acopio, beneficio y valor agregado del café y el equipamiento de una planta para procesar las cosechas de tan preciado grano.
En las localidades indígenas de Santa Cruz Itundujia, aún se conservan poblaciones que hablan una variante mixteca. Algunas mujeres que hacen parte del proyecto pertenecen al grupo de la tercera edad. Y más del 50 por ciento son consideradas dentro de grupos vulnerables. Ellas son cabeza de familia, pues debido a la decadencia en los sistemas productivos y en especial la actividad cafetalera, hay ausencia de hombres en las labores agrícolas. Gran parte de la población masculina migra de manera temporal o permanente para buscar opciones de trabajo.
Si bien se permite la participación de algunos hombres, se ha incentivado prioritariamente el involucramiento de las mujeres.
Las actividades, así como los resultados y beneficios del proyecto van dirigidos a impulsar la cadena de producción y de valor del café con la participación decidida de las mujeres sea en forma individual o colectivo. Un resultado de todo lo realizado en dichas comunidades es el aumento de la calidad de vida de las productoras al aumentar los ingresos por la venta del café. Ellas han mejorado los procesos de siembra y cosecha, los canales de venta y distribución de dicho grano.
Además del equipamiento que requieren en sus labores, las mujeres reciben asistencia técnica y certificación. En paralelo, actividades dirigidas al cuidado de los infantes y al fortalecimiento de valores de cooperación, derechos humanos y equidad de género.
La toma de decisiones del proyecto cafetalero y mejoras del medio natural se realizó mediante asambleas, recabando la opinión y decisión de la mayoría del grupo de mujeres productoras. Ellas establecieron un reglamento interno donde se fijaron claramente los compromisos y obligaciones, así como derechos, facultades y beneficios de los participantes.
Previamente a este proyecto se trabajó con el grupo de mujeres indígenas en la producción de plantas de café en vivero y la rehabilitación de cafetales. El trabajo en grupo de las mujeres fortaleció la organización y permitió el mejoramiento del sistema productivo.Lo hicieron bajo estándares de certificación para así tener un mejor acceso a los canales de comercialización.
Es importante destacar también las estrategias propuestas y realizadas a fin de adaptar el sistema productivo de café al cambio climático, el cual afecta ya de manera muy severa al estado de Oaxaca. Y muy especialmente a las regiones con mayores carencias económicas y menos atención por parte de las instancias oficiales. En las comunidades indígenas de Santa Cruz Itundujia, distrito Putla, región Sierra Sur, ha sido importante el hacer a un lado las prácticas inadecuadas en la producción de café pues afectan los rendimientos y al ecosistema. A la par terminar con los manejos inadecuados poscosecha que puedan afectar la calidad del café.
Como parte de todo lo anterior se establecieron estrategias de diversificación biológica y productiva; el uso de bioinsumos para la nutrición de cultivos, y manejo integrado de plagas y enfermedades para proteger el ambiente y aumentar la resiliencia del agroecosistema cafetal.